4 Claves que
podemos aprender del mayor Líder que hemos conocido – Jesús.
Vamos aprender de
Él cómo tratar a las personas.Texto Base: Mateo 4.23 –
25.
1ª Clave - Amor
incondicional
Jesús no tenía preconcepto
de las personas.No vía lo que tenían, ni como se vestían, ricos y pobres, débiles
y fuertes, demostraba una actitud de atención a todos los que se le acercaban. Aun
que fueran pocos minutos, no dejaba de platicar o enseñar algo a toda clase
de personas.Platicaba con príncipes y con personas del pueblo consideradas de
menor valor por una sociedad
menospreciativa.Daba a atención a los
poderosos, pero también a los leprosos y demás enfermos de la ciudad.Detuvo una multitud para atender un ciego, y tuvo tiempo para
cenar con líderes políticos y personas de influencia de su época.
Sabia participar de una fiesta/banquete (bodas de cana) pero
también reconocía las necesidades de las personas menos favorecidas (Mateo 9:36),
porque las miraba con hambre y miraba que eran como ovejas sin pastores, (sin lideres),
no quedaba apenas con sentimientos de compasión sino que actuaba para
ayudarlas. Después de sentir compasión las alimentó. (Mateo 15.32)
El líder tiene que aprender a reconocer las necesidades de su
pueblo, de sus seguidores, independiente de que clase social pertenezcan, tiene
que crear mecanismos de ayuda, de acuerdo con sus carencias, sea empresarios,
obreros, de elevado nivel intelectual o sin letras, tanto grandes y pequeños.
2ª Clave – Su carisma incomparable
Poseía un carisma incomparable, una habilidad para atraer otras
personas a sí, por el hecho de abrir oportunidades para todos, era buscado por
una enorme cantidad de seguidores, algunos por curiosidad, otros por necesidad,
otros atraídos por su gracia y amor, no importaba los motivos por los cuales
llegaban a Él, el resultado siempre era el mismo, las personas salían con algún
valor agregado.
El líder tiene que tener carisma, las personas deben encontrar en
el, cualidades que les permitan acercarse en caso de dudas, problemas, consejos,
amistad, dirección, y poder sentir confianza que el líder no les defraudará con
una actitud áspera y prepotente.
¿Cuál ha sido nuestra actitud para con las
personas?¿Sabemos atenderlas cuando nos necesitan, o huimos de sus problemas
3ª Clave - Confianza (autoridad).
Todas las personas que se
llegaban a Él, podían reconocer que era un hombre diferente, sus
palabras, sus gestos, sus actitudes, sus enseñanzas, demostraban que venían de
una base de autoridad incuestionable, no dejaba dudas, no necesitaba que lo
auditara, ni que probara su carácter, simplemente convencía, trasmitía
confianza, su autoridad chocaba los líderes políticos y religiosos.
Cuando pensaban que iba a equivocarse o dar un mal consejo,
destilaba conocimiento y integridad de sus labios, mencionó la necesidad de
pagar tributos a Cesar, sin negar la responsabilidad de dar a Dios lo que a
Dios pertenece (Mateo 22.15).
¿Cuál ha sido nuestra actitud? ¿Estamos liderando con el ejemplo
de nuestras acciones, o con conceptos que ni nosotros hemos sido capaces de
aplicar en nuestro liderazgo?¿Trasmitimos confianza a las personas, o dudan de
nuestro carácter?
4ª Clave – No
desistir del objetivo
Jesús pudo haber desviado de su objetivo varias veces. Cuando fue
llevado al desierto para ser tentado, pudo haber elegido la gloria del mundo en
lugar de morir por nuestras vidas. Sus mismos discípulos intentaron desviarlo
de su propósito, recomendándole a que no fueras a morir, que tuviera compasión
de sí mismo. En la cruz lo insultaron, le pidieron que se bajara y demostrara
que era el Hijo de Dios, su propia alma se angustió y rogó al padre que pasara el cáliz
de Él, pero si no, que se hiciera su voluntad.
El líder tiene que ser determinado, no debe desanimarse por
cualquier cosa, las personas querrán desviarnos de nuestros objetivos, de
nuestro propósito, aún nosotros mismos seremos llevados a ceder, a desistir,
más que gran ejemplo nos dejó el Maestro, al menos algunos luchan para llegar a
un objetivo financiero, a comprar una casa, un mejor auto, a salir de
vacaciones, pero Él luchó para cumplir un deseo que lo único que ganaría en
cambio seria nuestras almas.
Para tratar mejor a las personas, debemos visualizar un objetivo, por ejemplo: Usted quiere llegar a ser Gerente de Ventas de su empresa, y para ello tendrá que ganar la amistad de sus vendedores y distribuidores. Quizás haya uno o unos que no sea de su agrado, aún así usted debe desarrollar habilidades para tratar con ellos, mismo cierto de que ellos no se encuadran en su patrón de vendedor o distribuidor ideal, porque si chocas con ellos ahora, podrá convertirse en un problema u obstáculo para llegar a la meta, al objetivo que es convertirse en el Gerente de Ventas.
Su determinación para llegar a la meta, te llevará a comprender y trabajar con personas difíciles, cuando aparezcan situaciones difíciles, hay que recordar que tenemos un buen ejemplo a seguir, el Señor Jesús, Él siempre supo resolver conflictos, su objetivo era mayor que los obstáculos que intentaban desviarlo de su objetivo.
Pero si ponernos en práctica estas 4 claves que aprendimos del
ejemplo del Señor, las personas querrán estar a nuestro lado, estarán atentas a
nuestras palabras y nuestro liderazgo
será más útil para una sociedad carente de buenos lideres.
Hasta la próxima,
Liderazgo Eficiente
Nenhum comentário:
Postar um comentário